La diseminación de la ignorancia

Hace unos días un buen amigo me envió un artículo sobre la diseminación de la ignorancia. El artículo usa el término agnotología. Cautivó mi atención pues no conocía ese término. Busqué en Wikipedia la enciclopedia libre y encontré lo siguiente:

La agnotología (del griego ἄγνωσις, agnōsis, "desconocer" (griego ἄγνωτος "desconocido"1 ), y -λογία, -logía.2 es el estudio de la ignorancia o duda culturalmente inducida, especialmente a la publicación de datos científicos erróneos o tendenciosos.

El término fue inventado por Robert Proctor, profesor estadounidense de Historia de la ciencia y de la tecnología en la Universidad de Stanford.4 5 6 De forma más general, el término también hace referencia a los casos cada vez más comunes en que un mayor conocimiento de un tema resulta en que se tengan más dudas que al comienzo.

Robert Proctor observó que algunas compañías estaban publicando información con el propósito de crear duda en la mente de los lectores sobre algunos datos científicos y la idea era que el público continuara usando sus productos.

Esto se estaba haciendo en la industria tabacalera. Las grandes compañías productoras de cigarrillos publicaban información que creaba duda en cuanto a lo que decían los científicos sobre el daño a la salud del tabaco para impedir que disminuyeran las ventas.

Esa misma técnica la usan los políticos para lanzar sus campañas con medias verdades y citas de estadísticas que no son completamente correctas con el propósito de ganar adeptos.

También las usan los religiosos con el propósito de tomar ventaja y manipular a sus miembros. Es digno de observar cómo muchos miembros de sectas se privan de satisfacer sus necesidades económicas para contribuir a mega iglesias y a las necesidades de sus líderes. Son muchos lo que pasan necesidades pero contribuyen a comprarle regalos como un avión privado al “Pastor” de la iglesia.

Esto se debe a que han pasado por un proceso de manipulación mental indebido. Sus mentes ya no están claras y los impulsan a actuar en contra de sus mejores intereses.

No es un asunto de inteligencia sino de control mental. Aún personas inteligentes como científicos caen víctimas de la manipulación psicológica. Esto no tiene que ver con la inteligencia sino con manipulación mental indebida de las emociones y de captar la mente de las personas.

Cuando recibimos información no podemos ser crédulos de todo lo que se dice sin importar de quién venga pues muchas veces personas en quien confiamos repiten conceptos que han escuchado o leído y no son del todo correctos.

Esto se observa mucho en la internet donde aparece mucha información de salud, finanzas y otros asuntos importantes y no tienen base para lo que dicen. A veces hablan de estudios científicos que se han hecho pero no los citan o dan información de dónde encontrarlos; son opiniones personales.

Cada uno de nosotros hace bien si se examina para asegurarse de que no es víctima de manipulación indebida y de que su mente está clara al tomar decisiones.